Nuestros amigos están activos

Lo que ya ha llegado...

El calendario de Laura Paloka ya está aquí, y es que a este 2010 se le cuentan los días con la página de un calendario... ¿Que es pronto para pensar en el nuevo año?... esta vez solo ha hecho 500 y nosotras no queremos quedarnos sin el...
En cada mes nos muestra personajes familiares que acompañan nuestro cotidiano y festejan el paso de los días: nos recuerdan que vienen los reyes, llega la primavera, es tiempo de asar castañas o hay que cambiar la hora. Y para los eventos privados, una página llena de pegatinas para personalizar nacimientos, celebraciones, visitas esperadas e inesperadas. Laura dibuja, pinta, diseña e ilustra, y sonríe, sonríe mucho y muy bien. Por eso da gusto ver colgadas sus ilustraciones en la pared todo el año.

Y lo que llegará...

A punto de salir del cascarón, aun es una sorpresa... estamos deseando tenerlo entre manos y verlo en un escaparate. Alberto Sobrino lanza al vuelo a su pájaro, y a nosotras nos encantará que anide en nuestra charca, aun falta un poco y ya estamos impacientes.

Jugando a las casitas

Da mucho gusto reencontrarse con los viejos amigos, pero qué grato resulta también hacer migas con gente nueva.
¿Hacía cuanto que no jugabas a las casitas? El sábado pasamos la mañana estupendamente, Diana nos habló de las guaridas de nuestros personajes favoritos, nos mostró cómo un buen libro puede ser un hogar, cómo en una historia se puede habitar confortablemente.

Después pudimos abrir compuertas a la creatividad fabricando nuestra propia casita: chozas, guaridas, nidos, chalets, aldeas, rascacielos...

Cada uno fabricó una casita a medida de su imaginación, donde dar cabida a las historias que esta temporada nos esperan en Rayuela, y a otras que vayamos econtrando por el camino.

Muchas gracias a todos los que nos acompañasteis el sábado e hicisteis de Rayuela una casita donde pasar la mañana tan agusto.

Tengo una casa, tengo...

Tengo una casa, tengo, en el campo, y otra casa, tengo, en la ciudad. Eso dice la canción.
Nosotras tenemos una en una charca, ya sabéis, aunque tenemos muchas otras en infinitos lugares.
Y una de nuestras favoritas es la librería Rayuela, c/ López Gómez 22. Así que si os apetece volver a ella o descubrirla si aún no la conocéis, os esperamos con las puertas, ventanas y libros abiertos el próximo sábado 13 de noviembre a las 12.00 h. Descubriremos cuántos pequeños rincones sirven de morada a nuestros personajes favoritos.
¡Ah, no te olvides de traer una caja de zapatos, una botella de plástico o un tetra brik con los que jugaremos a las casitas!

El pacto el bosque

Amaneció oscuro pero el mediodía resplandece, la noche amenaza con ser bien fría y dejarnos una madrugada helada. Así que nos llevaremos a la cama este álbum, que hoy recomendamos a esas mamás que nos son tan fieles y nos aguardan en los charcos, con sus cachorros ansiosos de buenas historias.
El pacto del bosque aun huele a tinta fresca. Editado por El Jinete Azul el mes pasado, es un cuento escrito por Gustavo Martín Garzo y transformado por las bellas ilustraciones de Beatriz Martín Vidal, ambos paisanos nuestros.

Decir que la historia es tierna no sería mentira, pero tampoco le haría justicia. Los lectores de Garzo encontrarán en este álbum ese clima de magia cotidiana, de maravilla sin sobresalto, de misterios en evidencia que envuelve su prosa. Los trazos de Beatriz hacen girar la historia sobre sí misma y nos llevan a reflexionar acerca del poder de la literatura, sí, curiosamente es la ilustración, en este caso, la que sirve en bandeja la reflexión metaliteraria que insinua el texto.
El uso del color como medio de transporte espacio-temporal nos sorprende y nos cautiva, no perdáis de vista cómo irrumpe ese maravilloso azul para ceder más tarde al sereno amarillo... Si pincháis en el enlace, os llevará a la página de la editorial para asomaros al libro, pero oledlo y tocadlo si tenéis ocasión.
Texto e ilustración, y la alquimia surgida de ambos, nos brindan una historia que habla del poder evocador las palabras compartidas con amor, y del amor mismo.

Otra tarde de otoño transcurre en la charca:

El melocotonero del jardín pierde irremisiblemente sus hojas y el cajón se llena de proyectos que tal vez serán.

Pensando en un club de lectura con adultos, en un taller con pequeños o en una sesión de cuentos van pasando las horas.

De pronto la silla gira sin querer, y sin querer se vuelve hacia la estantería donde descansan nuestros álbumes preferidos. Hoy asoma el lomo El desván, mmm, apropiado y apetecible, así que cambio la silla y el teclado por la alfombra y dedico un largo rato a disfrutar de la lectura sin más, sin pensar en un posible taller, ni en dónde le pondríamos el acento a la lectura en voz alta, ni en una reseña crítica, ni... Me detengo en una página, me salto otra, vuelvo atrás, sigo una línea con el dedo, miro la portada, vuelvo a la ilustración que me había saltado.

Tras un buen rato sumergida en el universo de Kitamura, regreso a la silla y al teclado. Por la ventana veo caer una hoja más... el otoño ya no tiene freno. Ahora, le hincaría el diente al novelón que espera su turno en la mesilla de noche ¿por qué esperar a la hora de dormir?. Allá voy, que hoy toca disfrutar.

La ventana de Saltalarana vuelve a ser alemana

El viernes día 1 de octubre, a las 18:00 en el Círculo Hispano germánico (Acera Recoletos, Valladolid), la ventana de Saltalarana vuelve a ser alemana.

Este año daremos un paseo por los álbumes de la ilustradora y autora Jutta Bauer, recientemente galardonada con el premio Andersen. A continuación iluminaremos un muro imaginario, tomando prestados los colores de su reina más famosa: precisamente La reina de los colores.

Será un muro que unifique nuestras ganas de jugar con las historias de Jutta, la magia de la lectura con nuestra fuerza creadora; arte efímero que terminará hecho pedazos en los bolsillos e intacto en nuestra imaginación. Os recomendamos traer una camiseta que se pueda manchar para poneros encima de la ropa... ¡crear mancha!

La actividad está dirigida a niñas y niños entre 6 y 12 años, la organiza el Círculo Hiapano Germánico y es gratuita y dura unos 80 minutos. Las plazas son limitadas, pero aun quedan unas pocas, podési poneros en contacto con Isabel o directamente con el Circulo para resrvar. ¿Qué mejor forma de terminar la semana?

De la Ceca a la Meca

El adivingo marcha bien, muy bien. En algunos sitios nos reciben con cierta desconfianza, invadimos su terreno y, en cierto modo, interrumpimos su cotidiano. Pero la maleta de la tía Mercedes hace amigos allá donde va, y El domador de sueños es todo un éxito; para terminar, con el adivingo nos divertimos un rato y de vez en cuando nos llevamos alguna sorpresa.
El viernes nos trasladamos a Zamora, la semana próxima continuamos la ruta por Valladolid, Villarramiel y Baltanás. Diana ha diseñado el calendario buen criterio, así que vamos dosificando fuerzas.